Washington, 6 abr (Prensa Latina) Vuelve hoy el presidente estadounidense, Donald Trump, al centro de las críticas tras reiterar el uso de un medicamento para la malaria contra la Covid-19 e insistir que los enfermos nada tienen que perder con probarlo.
La doctora Megan L. Ranney, médica de urgencias de la Universidad de Brown en Rhode Island, expresó alarmada que nunca había visto a un funcionario electo anunciar una cura milagrosa como lo hizo Trump.
El fármaco sugerido por el gobernante es la hidroxicloroquina y «tiene efectos secundarios», advirtió la doctora Ranney, citada por el diario The New York Times.
«Causa síntomas psiquiátricos, problemas cardíacos y una serie de otros malos efectos secundarios», recalcó la especialista mientras comentó que no existe suficiente evidencia científica para apoyar las afirmaciones del mandatario.
Para no ser absoluta, Ranney especificó que la droga «puede que tenga un papel para algunas personas», pero decir a «los estadounidenses que ‘no tienen nada que perder’, no es cierto».
Trump dobló su presión sobre el tema este fin de semana al emitir un consejo médico que va mucho más allá de la escasa certeza de la eficacia del fármaco, así como del consejo de los médicos y expertos en salud pública.
Al hablar de la hidroxicloroquina por segundo día consecutivo en una sesión informativa de la Casa Blanca, el presidente es «un ejemplo sorprendente de su descarada disposición a distorsionar y desafiar abiertamente la opinión de los expertos y las pruebas científicas cuando no encajan en su programa», subrayó el diario.
Sin medir consecuencias, Trump afirmó que opinaba por instinto y reconoció que no tenía experiencia. «Pero, ¿qué sé yo? No soy médico», dijo, después de recomendar el uso del medicamento no solo a los enfermos, sino también al personal médico con alto riesgo de infección.
«Si funciona, sería una pena que no lo hiciéramos antes», apostilló Trump al señalar «¿qué tienes que perder?» y luego ratificó que el gobierno federal había comprado y almacenado 29 millones de dosis de esa medicina.
Cuando un periodista pidió al doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas, que se pronunciara sobre la cuestión del empleo de la hidroxicloroquina, Trump, sencillamente, le impidió dar criterio.
Ante la insistencia del reportero de escuchar la opinión de Fauci, el mandatario dejó claro que no quería que la máxima autoridad del país en enfermedades infecciosas hablara porque «ha respondido la pregunta 15 veces».
Fauci planteó ya de manera publica su desacuerdo con el gobernante en este y otros puntos de vista, y volvió a desafiar el sábado en privado al ocupante de la Oficina Oval por seguir refiriéndose con tanto optimismo a la droga contra la malaria para tratar el nuevo coronavirus.